Santa Cruz (EP), 5 de marzo ‘24. Detenidas en la ejecución de obra desde noviembre del 2023 las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, su personal fue desmovilizado.
A partir de los primeros días de diciembre iniciaron las negociaciones para dar continuidad a la obra, en primera instancia se consiguió que los trabajadores percibieran un porcentaje de sus haberes permaneciendo en sus domicilios.
Durante enero y gran parte de febrero, las negociaciones estaban paralizadas. La comisión interna de la Represa Néstor Kirchner llevó adelante medidas de fuerza durante todo febrero y en los últimos días, la Represa Jorge Cepernic, también se sumó a las acciones sindicales de la misma índole.
Mientras tanto, en Buenos Aires, negocian para continuar con este plan de lucha y a medida que se realizan las pertinentes reuniones, crece la intensidad de las mismas. En este contexto, participaron los directivos de la UTE Represas Patagónicas, la UOCRA, el Comité Ejecutivo, ENARSA y el Ministerio de Trabajo, pero el avance de los encuentros no era significativo pues faltaba el interlocutor válido desde el Ejecutivo nacional.
Pese a la voluntad de las partes involucradas para continuar los trabajos en las Represas Patagónicas, el Ejecutivo nacional es la figura central en este asunto que busca una pronta y favorable resolución, pero la injerencia del propio presidente Milei, junto al ministro Caputo, es irremplazable en el acuerdo que deben afrontar con los bancos chinos quienes financian las obras, dado que sus funciones y representación atañen al Estado argentino. Por tanto, cualquier otro esfuerzo no es significativo si en las mesas de negociación económica, no se sientan Milei y Caputo con las financistas orientales.
Hasta el jueves de esta semana y con el vencimiento de plazos a la medianoche del último día de febrero, el panorama de situación parecía desalentador para evitar los despidos masivos de ambas plantas, por lo que, en comunicación con el delegado de la Comisión Interna de la UOCRA de la Represa Néstor Kirchner, Sr Blas Pérez , en declaraciones a la prensa patagónica, expresó “hay una luz de esperanza” y siguió, “hace apenas unos instantes me comunicaron desde Buenos Aires que hay un principio de entendimiento, apareció un representante del Gobierno Nacional y las conversaciones empezaron a rendir sus frutos”.
Consultado a que se refería agregó: “todavía no hay nada oficial, pero me hablan de continuar por dos meses percibiendo el sueldo con las actuales condiciones, eso daría tiempo de diálogo para seguir avanzando y volver, – Dios quiera- a retomar las tareas”, también informó que en el transcurso de la tarde de este viernes 1 de marzo, formaría parte de una reunión virtual para ser notificado, oficialmente, de los resultados del acuerdo, a la vez que se comprometió a informar de inmediato todo lo que en ese contexto se convenga: “Siempre fuimos muy responsables al volcar la información a nuestros compañeros, no queríamos crear falsas expectativas o temores innecesarios, por eso hablamos ahora, con un principio de acuerdo sólido”.
Son horas de arduas negociaciones, son miles de familias esperando se encuentre la solución a este conflicto; se espera en el trascurso del día poder contar con más detalles.
Información de contexto
Cabe recordar que a principio de febrero, el cuadro de situación mantuvo al gobierno de Javier Milei entre tomar la decisión de suspender indefinidamente las obras o buscar el acercamiento con el Gobierno de Xi Jinping y los bancos chinos, con el fin de alcanzar acuerdos por los contratos y establecer un nuevo calendario de desembolsos que permita reanudar los trabajos.
La historia de ambas represas comenzó con su planificación en la década del ’50, aunque oficialmente comenzaron con estas iniciativas en el 2008, no obstante la construcción inició en el 2015. Desde ese momento hasta ahora, varios fueron los impedimentos que han interrumpido el avance de las obras.
Estas obras están a cargo de la Unión Transitoria de Empresas (UTE), compuesta por las nacionales Eling Energía e Hidrocuyo y la empresa China Gezhouba Group Corporation (CGGC)
Al cambio de signo político en el gobierno nacional, tras las políticas de ajuste fiscal que plantea cumplir a partir de este 2024, Javier Milei, deberá decidirse el destino de ambas represas.
Si elige incluir a las represas patagónicas «Néstor Kirchner y Jorge Cepernic», en su lista de recortes, afrontaría el compromiso ineludible del pago correspondiente a la devolución anticipada y los desembolsos económicos de las penalidades asociadas al crédito chino, destinado a la construcción del complejo hidroeléctrico.
Así respecto a la financiación total de US$ 4.700 millones acordada, los bancos ICBC, China Development Bank Corporation (CDBC) y Bank of China Limited (BOC) se han afrontado el pago de aproximadamente u$s1.850 millones desde 2015 hasta la fecha para la realización de las obras y la fabricación de turbinas.
En tanto, si Milei opta por regularizar la situación mediante acuerdos con el Gobierno y las entidades bancarias chinas, los fondos en juego podrían nuevamente estar disponibles para reactivar las obras, con la posibilidad de recibir una asistencia de u$s500 millones durante al menos un año, sin que el Ejecutivo nacional deba aportar fondos durante ese periodo.
Del total mencionado, u$s200 millones se destinarían a reactivar las obras, en tanto que con u$s300 millones restantes, se destinarían para la caja de Gezhuoba, como devolución de los fondos propios que aportó durante la pandemia para el pago de sueldos, las redeterminaciones de precios por inflación y los mayores gastos derivados de las obras adicionales; además de lo demandado por la falla geológica de la represa Néstor Kirchner/Cóndor Cliff.
Fue durante la primera semana de enero que Zhang Jun (el CEO de Gezhuoba que controla el grupo constructor de las usinas asociado con la local Electroingeniería) se reunió con el gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal y el vicepresidente de Eling (antes Electroingeniería) Carlos Bergoglio, la socia argentina a cargo de las obras civiles. Allí, expresaron la preocupación de China por la paralización de las obras. Señalándose en esta ocasión, una incómoda incertidumbre en torno a quién sería la persona a cargo de ENARSA y consecuentemente sobre cómo se financiarán las represas.
Al 4 de febrero de este 2024, fuentes gubernamentales señalaron a TiempoSur que “el gobierno de Claudio Vidal está plenamente comprometido en gestionar la reunión y mantiene constantes conversaciones con las autoridades de ENARSA, aunque las herramientas disponibles para el gobierno provincial son limitadas”.
Hoy para reactivar las obras, el Gobierno debe actualizar dos contratos pendientes de las administraciones de Macri y Fernández. El «Contrato Principal de Financiamiento» con los bancos chinos necesita ser ratificado tras la reformulación del proyecto en la gestión macrista. Además, el contrato de «Construcción» suscrito por De Vido y la UTE Gezhouba-Electroingeniería requiere la aprobación de la «Addenda 12» de 2021, que incluye ajustes por una falla, gastos improductivos y una falla geológica detectada en 2019 en la represa Néstor Kirchner. Se trata de una fisura en el suelo en la ubicación planificada para la represa, a 120 kilómetros de El Calafate. Motivo por el cual se detuvo el progreso de las obras en este sitio.
Aunque se debata ahora sobre los contratos y los montos involucrados, sucede que las usinas deberían ya haber estado terminadas y en servicio desde hace tres años, cuestión que en la actualidad sólo muestran un desparejo grado de avance.
La represa Jorge Cepernic/La Barrancosa tiene un 42% de las obras civiles realizadas con dos de sus tres turbinas en el país para ser instaladas. En cambio, la Néstor Kirchner o Cóndor Cliff, sólo está construida en un 18% y sin ninguna de las cinco turbinas fabricadas.
De las 3.000 personas contratadas que tiene la UTE encabezada por Gezhouoba, 2.100 permanecen en sus domicilios y cobran solo el 60% de sus salarios. Los 900 trabajadores restantes desempeñan tareas de mantenimiento y control de los obradores con sueldos de convenio, sin extras, ni adicionales, que vienen pagando a medias entre el consorcio y Enarsa. China aguarda ahora un gesto del ministro de Economía, Luis Caputo, para activar el desembolso.
Fuente: InfoBaires 24