Buenos Aires (EP), 12 de septiembre ‘24. La multinacional anglo-holandesa crece con el petróleo crudo de Vaca Muerta. Y apuesta al offshore. Con el fin de las restricciones subirá la apuesta.
La petrolera anglo-holandesa Shell aumentará un 40% su producción de petróleo crudo en Argentina, que pasará de los actuales 50.000 barriles por día (bpd) a 70.000 en 2025. Será gracias a sus inversiones en el shale oil de Vaca Muerta, en donde destina de 500 a 600 millones de dólares por año.
Esos 20.000 barriles diarios se destinarán plenamente a exportaciones, pues el mercado interno ya está abastecido.
En la celebración del 110° aniversario de su llegada al país -el 10 de septiembre de 1914-, el presidente de Shell Argentina, Germán Burmeister, anticipó que el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) va a ayudar a potenciar la actividad y los desembolsos de la multinacional, aunque también señaló que el levantamiento de los controles de capitales -cepo al dólar- es indispensable.
«Cuanto más rápido el Gobierno elimine el cepo, mejor. Es una distorsión más», comentó el ejecutivo.
«El RIGI no tendría que existir. Existe porque falta credibilidad en el país», agregó.
Además, Burmeister indicó que Shell está interesada en el proyecto de producción y exportaciones de Gas Natural Licuado (GNL), que ahora tiene a la cabeza a YPF y Petronas.
«Somos los segundos productores más grandes de GNL en el mundo, detrás de Qatar Energy. Argentina es una opción más que vamos a tratar de explorar, es un mercado que nos interesa», dijo.
La anglo-holandesa tiene hoy plantas de licuefacción de gas en Brunei, Nigeria, Australia, Oman, Qatar, Trinidad y Tobago, Egipto y Perú, así como de regasificación en la India y en Gran Bretaña. Y opera 18 buques de transporte.
Hoy sus operaciones están concentradas en el Upstream -exploración y producción de hidrocarburos- y su negocio está separado del Downstream -refinación y comercialización de combustibles-, donde la marca es más conocida por sus consumidores. Las estaciones de servicio son desde 2017 de Raízen, una empresa brasilera que comparte con Cosan.
La petrolera tiene el 90% y opera los campos de Cruz de Lorena, Sierras Blancas y Coirón Amargo Sur Oeste junto a la estatal Gas y Petróleo de Neuquén (GyP), y el 50% de Bajada de Añelo con YPF.
Por otro lado, participa del 45% en La Escalonada y Rincón de la Ceniza con GyP y la francesa Total; del 30% de Bandurria Sur, con YPF y la noruega Equinor; y del 22,5% de Acambuco, junto a YPF, Pan American Energy (PAE), Vista y Pluspetrol.
Otra de las apuestas de largo plazo de Shell es la exploración offshore, en el Mar Argentino. En ese sentido, el secretario de Turismo, Ambiente y Deportes, Daniel Scioli, le entregó ayer a la empresa el permiso ambiental para hacer la exploración sísmica en 3D en las áreas 107 y 109 de la Cuenca Argentina Norte (CAN), a 300 kilómetros frente a las costas de Mar del Plata.
Los trabajos serán en la ventana de octubre 2024 a marzo 2025, que es cuando hay disponibilidad de barcos, junto a Qatar Energy. Las áreas quedan cerca de la CAN-100, donde Shell es socio de Equinor e YPF, cuya búsqueda resultó en un «pozo seco», con bajas probabilidades de desarrollar económicamente su producción.
Fuente: Clarín
Fotografía Energy Connects